domingo, 23 de septiembre de 2012

Pensar despacio

Sólo si has contemplado con amor y respeto la inmensidad de los campos de Castilla, la línea del horizonte de un mar de tierra, alimento y vida, sabrás pensar despacio. Sólo quien tiene complicidad con lontananza de oro, plata y mirra intermitente entiende este mensaje. El carácter reflexivo de quienes valoran los cereales como se valora el oro es más bien innato y no adquirido. Enséñame a pensar deprisa y te descubriré la belleza de pensar despacio.